jueves, 31 de mayo de 2012

Un lugar en el mundo

          El que buscamos todos, no al sur de Río Grande, donde Adolfo Aristarain filmó esta película hace ya veinte añitos. Ese lugar, a veces, en un rincón esquinado de nuestro propio costado, del que no hay billete de vuelta.
        Película de perdedores perdidos, parece que Aristarain tuvo que hipotecar su casa para poder rodarla. También le supuso un pleito con la Academia de los Oscar que, no podía ser de otra forma, perdió.
        Se cuenta que en las primeras proyecciones en Madrid, los asistentes veían íntegros los créditos finales y no eran capaces de levantarse de las butacas hasta minutos después de encenderse las luces. Sería que habían encontrado su lugar en el mundo.
          Poesía visual no buscada, de esa que te asalta sin avisar.  Por si alguien quiere cotillearla de nuevo, aquí la dejo. En su lugar.
http://www.youtube.com/watch?v=uJIx3OaWCmk

1 comentario:

  1. Una película emotiva, hermosa y que lo tiene todo; la he visto cada vez que la ponen en tv. Magnífica. Besos.

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